Hace casi 5 meses que hice esta receta y a pesar de lo sencilla.. qué pereza escribirla!!
Y como he decidido plantarme en este punto de mi vida e ir cambiando cosas poco a poco que ya toca.. pues aqui estamos, venciendo la pereza y publicando una vieja receta estupenda, sencilla y que se puede hacer perfectamente con sobras de carnes, pescados o aves.
Es ideal para congelar por partes, para sacar en cualquier momento y darle un golpe de calor en el microondas o en el horno.
Ingredientes (las cantidades dependen de la cantidad de relleno, 2 mangas pasteleras llenas dan para rellenar unos 16, 20 canelones)
Sobras de pollo (en este caso yo puse lo que sobró de este pollo que comimos en Nochevieja: pollo relleno con carne, pasas, orejones, dátines y bacon)
Tomate frito (no pongo cantidades, más abajo os digo cómo tiene que quedar la pasta del relleno y vais viendo la cantidad necesaria, pero aproximadamente unas 8 cucharadas)
2 cebollas medianas
1 ajo grande
3 cucharadas de aceite de oliva
1 paquete de canelones precocidos (vienen 16 ó 20)
Para la salsa bechamel:
1 cucharada de mantequilla
1 pizca de nuez moscada
1 cucharadita de sal
40 gramos de harina de trigo (harina normal de uso común)
500 mililitros de leche
1 pizca de pimienta blanca
250 gramos de queso emmental o cualquier queso para fundir
Preparación:
En un bol ponemos los restos que vayamos a usar para rellenar los canelones.
En una sartén echamos el aceite y ponemos la cebolla muy muy picada junto con el ajo y dejamos que se haga muy bien. Echamos el relleno que teníamos triturado, damos unas vueltas y añadimos el tomate frito hasta que consigamos una pasta que podamos meter en una manga pastelera o ayudarnos con una cuchara; que no quede líquido, lo justo para que la mezcla quede unida como una pasta, pero tampoco seca. Reservamos.
Por otro lado hacemos los canelones siguiendo las instrucciones del paquete. Éstos son precocidos así que solamente he tenido que meterlos en agua hiviendo y sal unos minutos, los he sacado y puesto sobre un paño para quitarles el exceso de agua y los he ido poniendo en una bandeja un poco aceitada para que no se peguen. Los vamos poniendo unos al lado de los otros.Rellenamos los canelones: vamos poniendo el relleno con ayuda de una manga pastelera sin usar ninguna boquilla para que salga una masa de un dedo de grosor. Yo he puesto dos hileras de relleno en cada canelón.
Ponemos la masa en un lado -por ejemplo a la izquierda- dejando unos milímetros para girar el canelón sobre la masa y hacer un cilindro, un rulo (podemos usar una cuchara y entonces pondremos un par de cucharadas y lo vamos aplastando y alargando)
Si vemos que hemos echado poca masa rellenaremos por los lados añadiendo más masa ayudados por la manga pastelera.
Una vez estén todos hechos los ponemos en la bandeja apta para horno con el fondo un poco aceitado y los colocamos pegaditos uno al lado del otro.
Hacemos la bechamel:
En una olla ponemos la mantequilla y cuando se derrita echamos la harina dando vueltas para cocinarla un poco. Añadimos la leche (mejor tibia para que no haga grumos) y batimos fuertemente para deshacer los grumos que pudiese tener. Agregamos la sal, la nuez moscada y la pimienta y seguimos dando vueltas hasta conseguir la textura deseada (yo la dejé suave, no muy gruesa)
Añadimos 100 gramos queso y damos unas vueltas para que se deshaga.
Echamos por encima de los canelones y terminamos poniendo por encima el resto del queso y un poco de perejil.
Gratinamos en el horno a 200ºC unos minutos hasta que veamos que el queso empieza a dorarse.
Nota: podeis rellenar los canelones con sobras o con lo que querais, pero siempre que el relleno esté previamente cocinado para que no quede nada crudo.
Te felicito pues de sobras has preparado un plato 10.Besos
ResponderEliminarMuchas gracias doris!!
EliminarEso a mi también me ha pasado ehh es que tiene su trabajo el blog que parece que no.... te quedó genial.
ResponderEliminarbesos