Hay alguien en este mundo al que no le gusten las croquetas? Yo creo que no.
A mi me encantan, y ahora con la receta de la abuela de Catalina sé que tengo el éxito asegurado independientemente del relleno que le ponga.Son muy jugosas, con una bechamel muy suave y llenas de sabor por la cantidad de relleno.
El empanado crujiente, no se deshace al freir y mantiene perfectamente todo dentro. El pan rallado es una molienda especial super fina de Aranjuez.
Gracias Catalina, esta receta quedará entre los imprescindibles de mi cocina para toda la vida.
Ingredientes para 25 croquetas (18 si las haceis tan grandes como yo)
150 gramos de jamón serrano (yo compré unas lonchas y las metí en la picadora hasta que quedaron desmenuzadas)
85 gramos de harina de trigo
30 mililitros de aceite de oliva
200 mililitros de leche
200 mililitros de agua o caldo de pollo
1 cebolla mediana
1 pizca de nuez moscada
Sal (si son de jamón no pongáis apenas sal)
Pimienta
Para empanar las croquetas
2 huevos medianos batidos
pan rallado
Preparación:
En una sartén o cacerola ponemos el aceite, y cuando esté caliente añadimos la cebolla muy picada con la sal, la pimienta y la nuez moscada y dejamos que se haga.
Echamos la harina de golpe y damos unas vueltas que se cocine unos minutos para quitar el sabor de harina cruda.
Pasados los minutos añadimos la leche y el agua o el caldo de pollo y removemos bien a fuego medio fuerte y dejamos que espese sin dejar de remover para que no se pegue en el fondo.
Cuando tengáis la bechamel hecha yo os aconsejo que le paséis la batidora para que se os quede fina, lisa, sin grumos y además los trozos de cebolla desaparecerán.
Añadimos los trozos de jamón serrano, damos unas vueltas al calor de nuevo y rectificamos de sal.
Ponemos la masa en una bandeja larga y no muy profunda, la tapamos con un papel film transparente para que no se haga costra por encima y dejamos 12 horas que repose para que se enfríe y coja cuerpo.
Pasado este tiempo sacamos y hacemos bolas ayudándonos con dos cucharas, aunque yo, que soy bastante torpe las hice con la mano.
Batimos los huevos y ponemos en un plato los huevos batidos y en otro el pan rallado y pasamos las croquetas por pan rallado, luego las rebozamos en el huevo y terminamos pasándolas por pan rallado de nuevo.
Freír en abundante aceite caliente y sacar a un papel absorbente antes de servir.
Nota: se pueden congelar sin freir y a la hora de consumirlas se fríen sin descongelar.
Nota: si queremos darle aún más sabor podemos echar la mitad del jamón justo cuando la cebolla esté hecha y antes de añadir la harina, o meterle al caldo o al agua un trozo de hueso de jamón, infusionar y retirar.
te han quedado de cine ¡¡¡ super lujo, besitos
ResponderEliminarclaro! pero si tenia la mejor receta...la tuya!!!
ResponderEliminarun besooo
Que me gustan, se ven deliciosas.Bsss
ResponderEliminarQue buenas pintas! Acabo de encontrar tu blog, he de decir que me encantan las recetas que he visto, pero que me has conquistado con los bizcochos de Moya, que alegría da encontrarte una receta de tu tierra cuando estás fuera. Desde hoy me quedo fia aquí.
ResponderEliminarmil gracias mimi!!! mi madre es de telde, mi abuela de firgas... y toda la vida he crecido comiendo pan de matalauva, turrones canarios... y ya que llevo tiempo en la cocina no he podido por menos que buscar y buscar para recordar aquellos tiempos y sabores.
ResponderEliminargracias por tu comentario. un abrazo!