



Ingredientes:
2 láminas de masa quebrada
Si queréis hacer vosotras la masa:
150 gramos de harina
75 gramos de mantequilla fría
1 huevo
50 gramos de azúcar glass
Una pizca de sal
En todos los casos necesitaréis además:
Mantequilla derretida para pintar
Azúcar al gusto
Canela o vainilla (también puede ser azúcar avainillado)
Preparación de la masa para las galletas si no usáis láminas compradas:
En un bol ponemos la harina tamizada con la mantequilla en dados y mezclamos con los dedos hasta conseguir una masa arenosa.
Añadimos la sal, el huevo batido y el azúcar y amasamos, más bien aplastamos todo hasta integrar. No debéis trabajar mucho la masa porque se calentará la mantequilla. Es mejor integrar lo justo y dejar enfriar durante una hora y luego volver a amasar un poco y dejar enfriar de nuevo.
Una vez fría cortamos la masa en dos y las estiramos hasta que queden de unos milímetros de grosor y hacemos las galletas:
Usaremos una lámina o una masa para hacer las tiras verticales y la otra lámina o masa para hacer las tiras horizontales.
Foto 1.-Cortamos la lámina con un cuchillo sin llegar hasta el final unas tiras de 1 centímetro de grosor. Os recomiendo usar un palito, vara o algo para que os salgan todas del mismo grosor, tanto las verticales como las horizontales.
Foto 2.- Levantamos tiras alternando una no y una sí hasta completar todas y pasamos una tira horizontal que ya teníamos cortada.
Foto 3.- Bajamos las tiras que teníamos subidas.
Foto 4.- Levantamos las tiras horizontales que en la foto 2 estaban por abajo y volvemos a pasar una tira vertical y bajamos todas.
Foto 5.- Seguimos este proceso hasta terminar con todas las tiras.
Con un vaso pintado con un poco de aceite, un cortapastas o lo que queráis cortáis la masa y la ponéis sobre papel de horno.
Pintáis con mantequilla derretida y le añadís el azúcar por encima y la canela o azúcar avainillado (si hacéis la masa vosotras podéis poner la canela o la vainilla en la masa)