PANQUEQUES O PANCAKES DE AVENA (opción sin gluten ni lactosa)

Estos son los pancakes que más le gustan a mi hijo. Súper sanos, saludables y muy ricos. En casa hemos terminado todos por comerlos. Si la harina de avena es sin gluten y tenemos cuidado de ponerle chocolate puro o sin él y engrasamos con aceite de oliva o coco, es una opción sin gluten ni lactosa.

Los pongo en dos versiones: con y sin polvos de hornear. La única diferencia es que con polvos de hornear (levadura química Royal en España, o polvo para hornear Levapan en Colombia) quedan más gruesitos y esponjosos, y sin ellos, más húmedos, que nos gustan más. 

La foto de arriba son pancakes sin levadura y esta de aquí abajo, y la siguiente del corte, son con levadura. Como todo, el descubrimiento de las primeras fue por un error: se me olvidó poner la levadura. Un acierto.

Los podéis hacer con la harina que queráis, con la fruta que queráis o sin ella, con o sin chocolate en polvo (nesquik o similar. En este caso a dos les puse chocolate en polvo sin azúcar) ... las opciones son múltiples, os pongo variaciones más adelante.

Ingredientes para 6-8 pancakes aproximadamente:

100 gramos de harina de avena (podéis triturar avena que quede muy molida) Si vais a añadir milo, cacao en polvo, nesquik, cola-cao o parecidos, sustituid una cucharada de harina de avena por el cacao

2 Huevos grandes

2 Bananos grandes (maduros) los podéis cambiar por 4 mangos de azúcar o un mango grande, 300 gramos de arándanos dulces, o por un melocotón (durazno)..

7 gramos de levadura química/polvo de hornear (medio sobre) Este paso es opcional si las queréis más esponjosas y subidas.

Canela en polvo ó unas gotas de esencia de vainilla o ralladura de naranja, o de chocolate de tu preferencia.

Aceite o mantequilla para engrasar la sartén.

Preparación:

En una licuadora o vaso mezclador (también se puede hacer a mano sin problema con una varilla o un tenedor) ponemos todos los ingredientes y batimos hasta tener una mezcla homogénea. 

Va a quedar una masa como un puré espeso (foto abajo)

Cuando la sartén esté bien caliente, echamos el aceite y pasamos un papel absorbente para quitar el exceso; añadimos un poco de masa, lo justo para que llegue a todos lados en la sartén y bajamos un poco el fuego. 

Esperamos hasta que vemos que aparecen unas burbujas por encima y entonces con cuidado y una espátula, damos la vuelta al pancake.

Dejamos un par de minutos más y sacamos. 

Para el resto, volvemos a pasar el papel absorbente con el que habíamos quitado el exceso de grasa, subimos el fuego y repetimos la operación. 

Notas: a veces le pico unas avellanas o almendras, o le pongo una cucharada de mantequilla de marañones (anacardos) y complemento la receta para mi hijo de 18 meses.